Fabián Bergenfeld, en Construcción Plural

Diálogo con el abogado Fabian Bergenfeld, titular de la Asociación Civil de Defensa Ciudadana.


“Las condiciones que debió imponer la oposición a efectos de que no se desvirtuara la esencia de este último comicio, básicamente lo que es el sistema electoral, pasaba porque también se adelantara la toma del cargo por parte de los legisladores electos. Lamentablemente eso no sucedió, no se ha respetado absolutamente nada, ni siquiera ha habido respuestas en la pandemia que afectó a nuestro país y que causó más de 500 muertas. Dentro de lo que es el promedio mundial, ha sido Argentina nuevamente el líder como lo fue alguna vez en la hiperinflación y otras tantas veces ha tenido tristes liderazgos y tristes récords. La Argentina precisamente a partir de lo que fue el acto eleccionario en un momento tan inoportuno en donde la pandemia estaba en su punto más crítico justamente provocó una mayor cantidad de muertes. Sin embargo, nadie reparó en ello, nadie reparó en las consecuencias de que exista un Congreso que no esté legitimado como el actual en gran parte a partir del cambio que se produce en su composición, un Congreso no legitimado hasta el 10 de diciembre. Sí legal pero no legitimado por las urnas y por la voluntad popular. Pero el gobierno siempre tiene una carta bajo la manga y esto es producto de la inercia y de la pasividad más absoluta que se observa en la oposición. Ahora vemos esta “vetocracia”, porque claro, el 10 de diciembre va a asumir un nuevo Congreso, van a perder la mayoría que tienen y comienzan a implementar el sistema de veto. Recientemente lo ha implementado en un hecho gravísimo que es anulando una ley que permitía evitar la imposición de retenciones a sectores de la provincia de Buenos Aires en estado de total emergencia”.

“No tengo ninguna duda que desde marzo lo que se viene es la vetocracia del Ejecutivo, aplicando cualquier herramienta por más que sea ilegitima. Lo ilegitimo es desvirtuar la esencia del veto presidencial. Cualquier iniciativa que contradiga los fines políticos de este gobierno va a estar seguramente expuesto al veto. Evidentemente lo van a reservar para las cuestiones más trascendentes que encaminan o no a una República hacia sus fines más importantes. Todo el funcionamiento de las instituciones está absolutamente condicionado por este accionar ilegitimo por parte del gobierno actual que tiene un nuevo exponente ahora con este proyecto de ley de Radiodifusión al que podemos también bautizar en forma pintoresca “Radioconfusión” porque se pretende confundir a la opinión pública. Lo que está tratando de lograr el gobierno es lograr una ley que le permita controlar a los medios, silenciar a todos aquellos medios que no respondan a sus intereses. Por supuesto que había reformas que implementar a la ley pero esas reformas no justificaban un apresuramiento como el que se está implementando que está destinado a lograr que antes del 10 de diciembre se obtenga una sanción de una ley que permita confundir a la opinión pública, atacar el derecho de información que tienen los ciudadanos, restringir la libertad de prensa y en definitiva copiar un modelo que se está imitando de un dictador como es Hugo Chávez que en Venezuela está haciendo algo similar. Esto se hace bajo la orbita de lo ideológico. En nombre de los pobres y marginados se está en este caso tratando de engañar a la opinión pública haciéndole creer que por ser una ley de la dictadura tiene que ser abolida”.

“Siempre aparece la ideología así como apareció la ideología para que los bancos se quedaran con los depósitos de la gente, para que no se le pagara a los tenedores de títulos de la deuda que creyeron en el país así como se confiscaron también en nombre de lo ideológico los fondos de los afiliados a las AFJP vaciándose nuevamente el sistema previsional. Así como entre comillas nos sacamos de encima al Fondo Monetario Internacional pagando con reservas, deudas no vencidas y en gran parte ficticias -deudas que en realidad en buena medida eran discutibles- para asumir deudas con Hugo Chávez a tasas más altas. En nombre de lo ideológico, poniendo como pantalla a los pobres y marginados que son el 40 % de la población y que ha aumentado considerablemente gracias a la pésima gestión gubernamental. En nombre de ellos, precisamente, se está corrompiendo cada vez más el funcionamiento de las instituciones en la Argentina”.

“Se afectan siempre derechos adquiridos. El ejemplo más reciente es lo que pasó con las AFJP donde había una ley sancionada un año antes que permitía que los afiliados se mantuvieran en el sistema y ahora ese mismo Congreso sanciona una ley que compulsivamente los obliga a pasarse al sistema estatal. Acá permanentemente se violan derechos, en materia previsional ni hablar, la ley previsional nunca puede ser retroactiva. Permanentemente se están violando derechos adquiridos al amparo de una legislación anterior y en este caso con el fantasma y la mentira de siempre, que esto es para sacarnos de encima una ley de la dictadura. Y acá me permito profundizar otro punto que es el del COMFER. Nosotros le tenemos un desprecio a la figura del CONFER, yo en lo personal porque de ninguna manera funciona como si estuviera bajo la órbita de un mando militar. Cuando está consintiendo programas escandalosos, nocivos para la mente de nuestros hijos, sin respetar horarios. Sabemos que el COMFER tiene una función meramente decorativa, es excelente que se genere un mayor protagonismo en el COMFER pero no como lo plantea el proyecto con tres diputados oficialistas y dos de la oposición. Tiene que ser una entidad autárquica que esté integrada por especialistas que deberían ser expertos en comunicación, algún psicólogo que pudiera revisar los contenidos y que en definitiva actúe totalmente desprovisto de toda intencionalidad política. Acá lo que se está pretendiendo es conformar una especie de Consejo de la Magistratura que responda a intereses políticos, en este caso respondiendo a los parámetros que dicta el Poder Ejecutivo para controlar a los medios de comunicación con una mayoría integrada por diputados oficialistas, lo cual es un disparate, un despropósito. La realidad es que tenemos que apuntar más que a los tecnicismos a las intenciones y si tratamos de sacar maleza y en lugar de ver el arbusto vemos el bosque, tenemos que llegar a la conclusión que las intenciones del gobierno son nefastas. Más allá de que haya que modificar una ley que pueda ser anacrónica en muchos aspectos, hay que debatirla desde otro lugar y bajo otros parámetros. Con modificaciones sustanciales al proyecto que se está planteando. Porque lo que se pretende es violar el derecho de información de los ciudadanos, lograr confundirlos en lo que hace a la realidad que está viviendo el país con la clara intención de llegar a un acto eleccionario en el 2011 con gente que no sepa realmente que está sucediendo en nuestro país. Esta es la verdadera intención que esconde este proyecto así como la verdadera intención que escondió el traspaso de las AFJP fue confiscar el dinero y malversarlo como lo está haciendo el ANSES desde un comienzo. Estas verdaderas intenciones del gobierno absolutamente totalitarias son las que tenemos que frenar y la oposición -si es que la hay porque está absolutamente atomizada- es la que tiene que aparecer en escena definitivamente”.