martes, septiembre 23, 2025

La balanza de poderes en Europa del Este

 Por Lisandro Zamorano


Es sencillo identificar a las facetas tempo espaciales de una guerra. Por contrapartida, lo complejo es saber interpretar sus mensajes y sus propios códigos a tiempo. Hablar de ayuda a Kiev, de tratos eventuales de alto al fuego en la región de conflicto, o de una paz prolongada es algo que tiene requerimientos y quejas desde su propio seno. En este sentido, estamos en condiciones de afirmar que se trata de un terreno donde se están disputando varios intereses. Se presenta en dicho escenario un modelo de interacción que tiene lugar entre y dentro de estados, empresas, grupos, personas u organizaciones, lo que significa que el proceso se da a nivel intra e interestatal y también no estatalmente. Por lo cual, es necesario identificar a los actores que se benefician con este ámbito, llegando a predecir sus futuras acciones en el sector de conflicto.

La falta de informaciones sobre las condiciones específicas de vida de Ucrania y sus problemas demográficos resulta un elemento que no se puede pasar por alto. Respecto a los datos de índole económica, durante los últimos tres años, Ucrania recibió más de 45 millones de dólares en asistencia financiera por parte de Google.[i]

En cuanto a la ‘’globalización de la guerra’’, la ayuda europea sigue siendo escasa mientras que hoy Estados Unidos es criticado desde medios opositores por cometer errores de carácter táctico en función de su política actual hacia Ucrania. A partir de aquí inciden valores opuestos, en lo relativo a las formas de guerrear y hacia estrategias directas e indirectas de largo plazo. Mucho se ha hablado en los medios en cuanto al conflicto entre Rusia y Ucrania, descrito por algunos como ‘’invasión’’ mientras que otros mencionando la palabra ‘’operación especial’. Aquello que ocurre en este difuso, poco esclarecido escenario de batalla, es un enfrentamiento que es además dialéctico. Son distintas las modalidades de combate de un lado y de otro. Mientras que Rusia apunta por un predominio ofensivo aéreo, Ucrania tiende a consolidar un cinturón de defensa terrestre en su territorio para aislar al ataque ruso hacia el interior y destruirlo. Se trata de una maniobra de mayor extensión que tiene como objetivo afectar la logística y el potencial de destrucción enemigo. Es un hecho que los gigantes tecnológicos toman su posición en la guerra, así como otros actores. También, es por caso la situación en que se encuentran los complejos militares industriales en la región. Conviene anticipar, sin ir más lejos, la construcción del Ukroboronprom, referente local de la producción de armas y equipos militares en la zona.[ii]

Geopolíticamente hablando, quien no ocupa un espacio lo hace otro. Y en una confrontación bélica de esta magnitud, donde las interrupciones y los avances son la norma, lo que está en juego es el reordenamiento territorial de Europa. Concluir a grandes rasgos sobre este tema implica afirmar férreamente que la política exterior de un país es un reflejo de su estructura interna. La guerra deja de ser lineal. La cultura militar cambia también.

 

Etiquetas:

martes, septiembre 09, 2025

Reportaje a Carlos Fara, presidente de International Association of Political Consultants

Entrevista al consultor político Carlos Fara  




Díálogo con Camilo Tiscornia, director de C&T asesores económicos

Etiquetas:

lunes, septiembre 08, 2025

Una derrota de locos!

 Por Fernando Mauri

Periodista




* Hace semanas venimos adelantando que el PJ iba a imponerse el 07.09 en PBA, incluso intuíamos y algo así esbozamos, que con cierta holgura, pero sinceramente no atisbamos la goleada resultante desde ya, que sorprendió hasta el peronista más optimista. 

 
* Afloró un enorme voto castigo al Gobierno de extrema derecha, mucho más que un premio a la gestión del gran ganador del domingo, el gobernador Kicillof, y el PJ mismo. 

* Se cristalizó una demarcación de límites y se exhibió la necesidad de un alivio que pusiera freno a los desmanejos, corruptelas, procederes de casta "más de lo mismo" que se prometió erradicar, 
crueldades y violencias de Milei and cía.
La demarcación es nacional como lo exponen los resultados en muchísimas provincias,
creerse que el freno es sólo bonaerense sería una subestimación del sentir popular argentino.   


* "Es la micro, stupid", se podría parafrasear.
La macro ordenada (cuan ordenada está, a decir verdad???) es una base, no un fin del que enamorarse. El ciudadano de a pie lo sabe y castiga al loco del ajuste y la motosierra, el superávit a como dé lugar, al igual que el atraso cambiario dejando debajo de la alfombra el consumo, el salario real, el empleo, etc.
Maridado a eso, las denuncias de corrupción (de la hermana del presi, nada menos, y sobre el sector discapacidad, nada menos.2 recargado). 

* Ahora, el triunfo cantado de la oficialista LLA en las legislativas nacionales de medio término de octubre corre riesgos.
Sigue siendo hoy, el escenario más probable, pero quedan 7 semanas donde el Gobierno tiene más para desgastarse aún que para regenerarse. 

* Kicillof y el peronismo deberían ser cautos. La unidad entre tribus que se matan fue fundamental. Tampoco recayeron en errores como el de centrar la campaña en "Cristina Libre".
Sin embargo, en Argentina suele votarse más para "sacar" que por amor a "poner" un presidente, pero la cuesta al 2027 es larga y extenuante.
Y el recuerdo del desgobierno de la condenada CFK, Ma$sita y Alverso Fernández, está aún latente.
A su  favor, lo que ya dijo un tal Juan Perón:
"no es que nosotros seamos tan buenos, es que los otros son peores".    

* El temor por la ingobernabilidad futura (primero hay que atravesar las Fiestas de Fin de año) y la sana preclaridad en discusión de la salud presidencial para afrontarla, crece día tras día como interrogante.


viernes, septiembre 05, 2025

Audio de CONSTRUCCION PLURAL del 030925. Hugo Haime, Hernán Neyra & Rofman.

Etiquetas:

martes, septiembre 02, 2025

El fantasma del macartismo. La censura de los audios.

 Por Daniel Kiper


La democracia cruje bajo los pasos de los jueces y ministros: la prohibición judicial de difundir unos audios se convirtió en un espejo de épocas más oscuras. El juez Alejandro Maraniello, sin escuchar siquiera las grabaciones, dictó una medida cautelar que cercenó la libertad de expresión de antemano, como si la Constitución y los tratados internacionales fueran papeles arrugados en el fondo de un cajón.

La decisión se limita a determinados audios, pero su alcance simbólico es tan vasto que se lee inevitablemente como censura previa: la más antigua de las herejías contra el periodismo. Juristas y constitucionalistas lo saben bien: ningún poder del Estado puede clausurar lo que aún no se ha dicho. Y, sin embargo, allí está la firma del juez, anticipándose a la palabra como quien apaga una lámpara antes de que alguien encienda la vela.

No fue el único episodio. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, pidió a la Justicia allanamientos contra periodistas y un canal de streaming que difundieron los audios. Luego lo negó con la misma soltura con que McCarthy, en los años cincuenta, multiplicaba listas negras que nunca pudo probar. Pero las pruebas de su pedido de allanamiento existen. Y esa contradicción abre una herida que sangra por dos costados: el del abuso de autoridad y el de la intimidación a la prensa.

Los paralelismos con el macartismo son inevitables. McCarthy también usó al poder judicial y político para sembrar miedo, acusar sin pruebas, manipular a los medios y convertir al periodismo en cómplice involuntario de su cruzada anticomunista. En los Estados Unidos de entonces, los actores de Hollywood debían confesar lo que no habían hecho para no quedar en listas negras. Los académicos eran perseguidos por pensar demasiado y los periodistas por preguntar lo que no convenía. Era la caza de brujas, disfrazada de defensa nacional.

Hoy, en la Argentina, también se invoca la defensa nacional, aunque no hay hipótesis de conflictos . Pero sí hay periodistas, medios y ciudadanos que pueden ser señalados por difundir una verdad incómoda. El fantasma del macartismo no llega con uniformes de época ni con banderas extranjeras: llega con resoluciones judiciales exprés, con ministros que desmienten lo que firmaron, con la sospecha convertida en delito y con la palabra amordazada antes de nacer.

La censura, aunque se presente como medida cautelar, es siempre hija del temor a la verdad. Porque los puros y transparentes no temen a sus propios dichos y resisten eventuales audios y hasta se fortalecen con  ellos. Pero si necesitan prohibir, allanar y amedrentar, entonces …

En 1954, el Senado de Estados Unidos censuró a McCarthy para salvar lo poco que quedaba de la dignidad republicana. Ese gesto, tardío pero necesario, recordó que ninguna democracia puede sobrevivir si permite que el miedo se convierta en política de Estado. La Argentina de hoy debería aprender de esa historia antes de que sea tarde.

La Justicia tiene herramientas para investigar el origen de los audios y sancionar delitos sin mordazas previas; el Ejecutivo, para denunciar sin allanamientos a la prensa; y los medios, para informar con rigurosidad y contexto.

Porque lo que está en juego es la Republica. Y cuando la palabra es secuestrada por el gobierno, nos aturde el silencio y solo se escucha un eco vacío de quienes mandan.

Entrevista a nuestro Columnista radial HUGO HAIME

Etiquetas:

lunes, agosto 18, 2025

Los recortes que matan, parte II

 Por Daniel Kiper


La muerte, esa visitante silenciosa que en la Argentina suele llegar sin pedir permiso, esta vez se vistió de fentanilo. No fueron muertes súbitas del azar ni tragedias inevitables de la naturaleza: fueron muertes anunciadas. Anunciadas, advertidas y, sin embargo, ignoradas. Lo que empezó como una serie de casos aislados se transformó en una desgracia colectiva que, hasta donde las cuentas públicas alcanzan, suma cerca de noventa cuerpos y una legión de interrogantes. Las cifras varían según actualización y fuente; la última crónica oficial las ubica en las ochenta y tantas víctimas, pero todas comparten el mismo denominador: la tragedia pudo haberse evitado. A fines del año pasado, las inspecciones técnicas detectaron irregularidades graves en la producción de un medicamento que exige pureza y control absoluto. En mayo, la ANMAT emitió una alerta pública y luego inhibió la actividad del laboratorio, pero para entonces el veneno ya había circulado. Ese mensaje técnico, como tantos en este país de sordos voluntarios, se perdió entre el viento de la burocracia o, peor aún, en el laberinto de intereses inconfesables. Ni el Ministerio de Salud, mutilado por recortes y despojado de autoridad, ni el propio Presidente de la Nación —que ayer volvió a hablar— movieron un dedo para clausurar el laboratorio y secuestrar de inmediato los lotes que hoy están en el centro del espanto. Prefirieron señalar con el dedo acusador antes que actuar con la premura que el caso impone. Porque en la Argentina de estos tiempos, los recortes en salud no son simples números en una planilla de Excel: son tijeras que cercenan guardias hospitalarias, despiden inspectores, reducen laboratorios de control y desarman a los organismos que deben proteger la vida. Y cuando se recorta en salud, no se ahorra dinero: se adelantan funerales. Lo que ha ocurrido no es un accidente. Es el fruto amargo de una política que considera que el gasto en salud es un lujo prescindible y que las advertencias técnicas son un papeleo molesto. El laboratorio siguió funcionando en condiciones inadecuadas, sin inspecciones eficaces, sin cierres preventivos, sin decomisos urgentes, y participando en licitaciones estatales como si fabricar un medicamento contaminado fuera un detalle administrativo y no un crimen contra la vida, nuestra vida, la de nuestros hijos, la de nuestros vecinos. El Presidente Milei, en su discurso, eligió las palabras propias de la “casta” que dice combatir: culpó a su antecesor y volvió a mostrarse moralmente impasible. No comunicó medidas concretas de reparación ni asistencia a los deudos, no pidió perdón, no asumió la responsabilidad, no explicó por qué un Estado que podía haber actuado a tiempo se mantuvo quieto mientras las dosis envenenadas circulaban. Prefirió deslindar culpas, como si el gobierno fuera un espectador impotente y no el principal garante de la salud pública. En un país que ha soportado pandemias, epidemias y emergencias sanitarias, el mensaje que queda es peligroso: aquí se puede recortar el Estado hasta dejarlo en los huesos, y luego culpar a la fatalidad cuando la muerte entra por las hendijas que se abrieron con esas tijeras. Así, el Estado escribe por adelantado nuestro epitafio. Las víctimas no murieron de fentanilo solamente: murieron de abandono. Murieron de un Estado reducido a su mínima expresión, de una política que llama ahorro a la omisión y eficiencia a la desprotección. Murieron en un país que hace oídos sordos a sus propios organismos técnicos, que los ignora y pretende cerrarlos. Algún día, cuando el humo de esta tragedia se disipe, la historia no recordará tanto los comunicados ni los discursos, sino la verdad desnuda: que hubo un momento en que se pudo evitar la muerte y el gobierno eligió no hacerlo. Y que, en ese instante, las tijeras del ajuste se transformaron en la guadaña del verdugo.

Etiquetas:

jueves, agosto 14, 2025

La macro no está ordenada

Por Hernán Neyra 
Economista & Columnista de Construcción Plural





Trascurrido año y medio largo de gestión Milei, ¿qué es lo que tenemos como balance de estos casi dos años? ¿Por qué la cosa no arranca ni parece poder arrancar?
Y allí vamos hacia el sofisma de "la macro ordenada" . No hay ninguna macro ordenada: hay desequilibrio externo, fiscal, monetario, productivo y social.
Veamos.
Hay un desequilibrio externo: se reduce el saldo del comercio exterior y tenemos déficit comercial con China, Estados Unidos y la Unión Europea. Tenemos récord de déficit de balanza
de turismo que se come el superávit energético (gastamos los ingresos de Vaca Muerte yendo a Disney). Sigue habiendo cepo para empresas y los dividendos no girados al exterior se
estiman en U$S7.000 millones que están esperando para salir en cuanto se libere. Y eso mismo es lo que frena nuevas inversiones que no tienen horizonte de poder girar ganancias.

Hay desequilibrio fiscal, porque hay un supuesto superávit financiero que, nos dicen, corre riesgo si las provincias reciben los fondos propios, si se aumentan los sueldos de los médicos de
un hospital, si se aumenta el monto de un bono para jubilados en $40.000 pesos. Si cualquier cosa destruye el superávit es que no hay tal superávit, sino postergación de gastos inevitables.
Y lo peor es la capitalización de los intereses que no se pagan hoy, aumentando el peso de los intereses futuros de la deuda que hoy se ignora y se capitaliza en nuevos bonos. Se bajan impuestos que no se traducen en mayor recaudación por crecimiento económico. No hay
mejoras de productividad, no hay obra pública, no hay privatizaciones que hagan prever mayores ingresos fiscales; no hay gestión ni reducción de la informalidad.

Hay desequilibrio financiero. Las tasas de interés son exorbitantes. Y mientras más altas, mayores los incentivos a la toma de ganancias en el mercado para transformarlas en dólares con precios contenidos por operaciones en el mercado de futuros que generan mayor
desequilibrio financiero. El ministro de Economía se lamenta de que no haya un mercado de capitales vigoroso cuando el presidente del Banco Central sube los encajes a niveles altísimos,
mientras la emisión de pesos es constante, reduciendo el crédito, para evitar la mayor demanda de dólares porque, si sube el tipo de cambio, no hay otras políticas antiinflacionarias.

Hay desequilibrio productivo. Desde que cierran empresas textiles, productoras de bienes de consumo, cierran quioscos, se van empresas multinacionales, no sube la inversión más que en
sectores extractivos o el agro (que tienen los salarios más bajos y los menores coeficientes de empleo de la economía). La apertura y el tipo de cambio bajo sostenido por el mismo gobierno
hacen que remplacemos producción nacional por importados, destruyendo puestos de trabajo locales, en blanco, con lo que el sistema previsional será cada vez más deficitario.

Hay desequilibrio social cuando aumenta el desempleo y la principal preocupación de la población dejó de ser la inflación para ser el nivel de precios, el miedo a perder el trabajo y la caída en la calidad de vida. La ficción de los salarios altos en dólares con dólar artificialmente bajo da por resultado que un trabajador necesite 13 años de su sueldo entero para acceder a su primera vivienda, según Reporte Inmobiliario, cuando durante la convertibilidad eran 4
años. Con la misma lógica, un alquiler de un ambiente se lleva el 75% de una jubilación mínima.

Entonces ¿dónde está la macro ordenada? Ayer el titular del Palacio de Hacienda expresó que había poco crédito en dólares…Claro: quiere más crédito mientras tienen que subir los encajes en pesos
para evitar la fuga hacia el dólar, aumentando las tasas de interés. ¿Dónde se ve la lógica de algún modelo de crecimiento? ¿Quién tomaría crédito en dólares cuando ni el propio FMI es
capaz de afirmar que la balanza de pagos es sustentable ya que el Gobierno no puede juntar reservas en dólares?

El panorama no es alentador. No hay coherencia macroeconómica ni sustentabilidad. No hay política antiinflacionaria más que el tipo de cambio bajo con apertura comercial. Y los peligros
de sostener estas políticas combinadas por mucho tiempo son la profundización de la crisis y el achicamiento de la economía. En ese caso, seguiríamos hablando de un tradicional ajuste recesivo sin ningún esfuerzo, ni siquiera, por ser creativos y pensar alguna política compensatoria. 

Esa es la crueldad de este ajuste: no hay políticas de contención más que el aumento de la Asignación Universal por Hijo.
Para revertir todas estas carencias ¿el Gobierno haría algo distinto en la segunda mitad de mandato? 
Difícilmente, por cuestiones ideológicas. Un eventual cambio de gabinete no supondría grandes giros en las políticas. Así que ya podemos intuir lo que quedará de herencia para el final de los cuatro años de mandato libertarios.

Etiquetas: