domingo, octubre 29, 2023

Es la hora de la verdad

 Por Alejandro Rofman


 Es hora que se diga la verdad.

Milei se quedó sin nafta y vendió su nombre al capo de la mafia calabresa que le va a poner plata para la campaña. 

Milei carece de militantes que vayan a las esquinas o a golpear puertas. Macri lo va a llenar de dólares que tiene bien guardaditos.


Pero qué le va proponer Milei a la sociedad. No tiene nada que proponer excepto odio, persecución y brotes psicóticos. 

A lo mejor se baja porque se olvidó de tomar una pastilla pero no sabemos su final.

Es muy triste lo que pasa en el espacio de centroderecha. 

Los que lo integran y son amigos nuestros votan en blanco. De dónde va a sacar los votos que le faltan para ganar. Tendrá mucha plata cerca ilícita del caño de la mafia calabresa pero se quedó sin libreto.

Si no se lo denuncia como lo que realmente es, un fantoche neofascista alimentado por plata mafiosa, no se cumple con el debe ciudadano al ser periodista. Es deber de la prensa hacerlo. Si hasta Jorge Lanata lo hizo.


Massa es una joya al lado de la alianza entre el desquiciado que ahora es el personaje subordinado a la mafia y a los Fondos Buitre. 

Por mis hijos, por mis nietos y por la supervivencia del país, hay una sola salida: Massa.

miércoles, octubre 25, 2023

El Audio de CP del 241023 post Elecciones

Escucha"Construcción Plural - Programa 1078" en Spreaker.

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viernes, octubre 20, 2023

Terror y territorio, las dos "lógicas" del conflicto en Oriente Medio

 por Alberto Hutschenreuter




El ataque de Hamas a Israel, uno de los territorios más protegidos del planeta, causó conmoción y volvió a centrar la atención del mundo sobre esta sensible placa
geopolítica de Oriente Medio, separada por Turquía de esa otra placa que se extiende desde el Báltico hasta el Mar Negro donde también tronan las armas.
En Oriente Medio la dinámica de los conflictos mantiene una lógica propia, pues al sentimiento de humillación y frustración de los países árabes frente al poderoso
Estado de Israel y a la misma desunión árabe, se suma la fuerte rivalidad confesional y, en el caso de Irán, un país no árabe, la búsqueda de un reconocimiento de poder que
nunca podrá alcanzar mientras apoye y promueva el terrorismo y mantenga como objetivo la desaparición física de Israel.
En este complejo (y aquí reducido) contexto, ninguna parte ha sufrido más pérdidas y frustraciones que el pueblo palestino, pues no sólo no logró erigirse como Estado,
como lo hizo Israel en 1948 a partir de la decisión de Ben Gurion, sino que cada vez más se fue atomizando como territorio y población, pues los bolsones de refugiados
palestinos constituyen otra de las cuestiones mayores en la convulsa región.
Pero tal vez para los palestinos lo peor pueda estar por suceder. ¿Qué sería peor? No ya la imposibilidad de ser un Estado, sino la misma disolución del territorio palestino.
De hecho, las nuevas realidades que desde hace tiempo tienen lugar en la región han ido moviendo del centro el tema palestino. No se ha "licuado" la cuestión, por
supuesto, pero ha perdido visibilidad en la región y más allá. Y ello fungió favorable para Israel, sobre todo para el núcleo ultra religioso que forma parte del gobierno,
para el que todo puede llegar a ser negociable menos los límites del territorio, es decir, lo que en términos protohistóricos consideran territorio del pueblo israelí, el "Gran Israel Bíblico", una concepción geopolítica de cuño sagrado superior al territorio del Estado de Israel.
En este marco, resulta pertinente un artículo escrito recientemente en la influyente revista Foreign Affairs por Martin Indik, ex embajador estadounidense en Israel, y Zeil Ra´ad Al Hussein, ex Alto Representante de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
En dicho texto, los autores advierten sobre las concepciones político-territoriales que anidan en algunos miembros del gobierno encabezado por Benjamín Netanyahu, particularmente en el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich. Este funcionario, perteneciente al Partido Sionista Religioso, es un firme partidario de la anexión de Cisjordania a Israel, como sin ambages lo expuso en su ensayo de 2017 "El plan decisivo de Israel".

En sus palabras:
Lo que distingue a este plan de los demás es que "agarra el toro por los cuernos", abordando la raíz del conflicto y el fracaso, pasado y presente (y futuro), de las "soluciones políticas". No importa dónde los planificadores trazan sus fronteras propuestas, incluso si provienen de la llamada derecha (Sharon y Olmert tenían mapas; tal vez incluso Bibi tenga uno). La paz no surgirá mientras mantengamos nuestro control sobre las suposiciones iniciales de que esta tierra está destinada a contener dos colectivos con aspiraciones nacionales en conflicto. Si este es el caso, nuestros nietos y bisnietos estarán inevitablemente destinados a vivir por la espada.

En estos términos, el ataque terrorista perpetrado por Hamas podría crear una situación parecida a la que sucedió tras la guerra de 1967, cuando, como sostiene el ex canciller de Israel Shlomo Ben Ami, la contundente victoria militar de Israel sobre los países árabes produjo una ruptura en las referencias de identidad territorial que hasta entonces mantenía Israel. Es decir, los israelíes, o una parte importante de ellos, consideraron entonces que no había que conformarse con las fronteras reconocidas internacionalmente, sino que había que regresar a las fronteras remotas del pueblo de Israel.
Por ello, el ataque de Hamas podría volver a centrar esta cuestión, y si finalmente así sucediera, Gaza y Cisjordania, partes de aquel Gran Israel, pasarían a ser parte del Estado de Israel.
Sin duda, ello no traería orden, es decir, paz, pues no sólo el terrorismo de Hamas, su brazo armado y Hezbollah incrementarán su accionar terrorista en Israel y más allá,
sino que Irán, el valedor de ambos, podría pasar a la acción aun sabiendo que sus capacidades son inferiores a las de Israel y, por supuesto, a las de Estados Unidos.
Además, y ello sería funcional para Teherán, se podría detener el proceso de acercamiento entre Arabia Saudita e Israel (uno de los posibles propósitos detrás del ataque terrorista de Hamas), pues difícilmente los árabes vayan a aceptar la consumación de esa decisión geopolítica-religiosa de Israel.
En breve, en Oriente Medio predomina una lógica prácticamente irreductible: el terror es la respuesta a la geopolítica y la geopolítica es la respuesta al terror.

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miércoles, octubre 18, 2023

Medio Oriente: entre lo que se quiere destruir y a única solución

 Por Israel Lotersztain

Master en Historia de la Universidad Torcuato Di Tella 




   Para comprender el conflicto en Medio Oriente,
caben algunas disgresiones sobre los palestinos, que
distan de ser una unidad. Y si esa diversidad palestina no se toma
en cuenta es imposible entender lo que pasa y menos intentar
la búsqueda de soluciones. 
Veamos cómo se divide


- Los árabes de Cisjordania. Más de tres millones. Antes bajo Jordania,
hoy bajo la Autoridad Nacional Palestina (ANP), con la tutela armada
de Israel, y sujetos a la agresión de colonos judíos ilegales y
extremistas.
 
- La Autoridad Nacional Palestina y sus burócratas. Corrupta, inepta,
despreciada por su gente. Son laicos, reconocen el derecho a
la existencia de Israel, y pretenden la solución de dos estados,
la que a mi juicio, es la única solución a la larga del conflicto
que lleva décadas.

- Los habitantes de la franja de Gaza. Mas de 2,4 millones hacinados en
unos 350 km cuadrados, y dominados totalmente por Hamas. Viven
(viven?)desesperados. Al sur de la franja está Egipto, que los odia y bloquea más que Israel. Si de su millón de kms cuadrados Egipto les alquilara a sus hermanos árabes 3000 km cuadrados (de un Sinaí desierto!) su situación mejoraría dramáticamente. Pero Egipto no quiere ni escucharlo.

- Hamas: terroristas horripilantes, sangrientas bestias
salvajes, pretenden transformar toda la zona de Israel/Palestina en
un estado teocrático tipo Irán o ISIS, bajo la sharía al máximo, con
todos sus horrores. Los judíos serían desde luego expulsados o
liquidados, salvo los que ellos indiquen que se queden para trabajar
para ellos, "para pagar el alquiler por los años de ocupación". Contra
esos lucha hoy Israel. Es un gran dato a tener en cuenta. 
Contra ese grupo terrorista, solo contra ellos, pelea Israel.
 
- Los refugiados árabes y sus descendientes. En 1948 unos 700 a 800.000 palestinos le hicieron caso a las radios egipcia, siria, jordana,
libanesa, de irse para retornar cuando los ejércitos invasores ganaran
la guerra. La perdieron y no pudieron volver. Y se quedaron en
campos de refugiados en todos los países vecinos, mantenidos por
Naciones Unidas. Caso único, nunca se mantuvo a gente tanto tiempo.
Hoy se calcula que son tres ó cuatro millones. Ellos sueñan hasta hoy
con que podrán retornar a lo que hoy es Israel. Acoto: en 1948,
800.000 judíos sefaradíes/orientales que vivían en países árabes
debieron emigrar con lo puesto a Israel. Tema cuidadosamente olvidado
por los bienpensantes.

Los árabes ciudadanos israelíes. Descendientes de los que se quedaron
en 1948. Son casi dos millones (sobre 9,2 millones). Ciudadanos de
segunda quizá, pero gozan de educación de primera calidad, salud,
seguridad social, salario familiar de familia numerosa (lo obtuvieron
los judíos religiosos y estos ligaron de rebote). No quieren ni
pensar en irse de Israel para formar parte de un eventual estado
palestino. 


- Otro aspecto explica en mi opinión por que teniendo (especialmente
Arafat) tres ocasiones para tener un estado palestino pero debiendo
renunciar al derecho al retorno de los descendientes de los refugiados,
los palestinos dejaron pasar la oportunidad; es más, la rechazaron con
violencia. Se explica al comparar el PBI per cápita en
dólares por habitante de los países árabes que rodean a Israel 
(y algunos más como ilustración) y el de Israel al 2021. 
Los datos son tan elocuentes que no necesitan explicación. 
Ni cabe recordar que Israel no tiene ninguna riqueza natural salvo su gente, que es mas chica que nuestra provincia de Tucumán.

Irak:            4775
Egipto:        3690
Jordania:     4103
Líbano:        4136
Siria:             2971
Yemen.         701
Sudán:          769
Afganistán    502
Argelia:         3690
Tunez:           3807
Marruecos:  3795
Libia:             5357
Irán:               4091
ISRAEL:         52360


Ya lo dijo el canalla presidente de Irán Ajmadinejad
en su momento: "Israel es una espina clavada en Medio Oriente, un
cuerpo extraño que debemos extirpar".
Israel demuestra lo que puede hacerse con empeño, inteligencia, libertad de pensamiento, todo lo que algunos odian. 
Eso lo que Hamás quiere destruir. 
pretenden la solución de dos estados,
Y de nuevo, la única solución a largo plazo es tener dos estados. 

El Audio de Construcción plural del 171023

Escucha"Construcción Plural - Programa 1075" en Spreaker.

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jueves, octubre 12, 2023

El Audio de CP del 111023

Escucha"Construcción Plural - Programa 1073" en Spreaker.

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miércoles, octubre 11, 2023

El Audio de Construcción plural del 101023

Escucha"Construcción Plural - Programa 1072" en Spreaker.

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martes, octubre 10, 2023

Guerra y tensión en la placa geopolítica de Medio Oriente

Por Alberto Hutschenreuter




El sábado 7 de octubre, el movimiento islamista Hamas y su brazo armado, las Brigadas Al Qasam, lanzaron un ataque coordinado y letal sobre el territorio de Israel, uno de los más protegidos del mundo.


      ¿Fue una sorpresa para Israel? En buena medida lo fue, pues si bien los enfrentamientos entre las partes son cotidianos, las autoridades israelíes posiblemente confiaban en que su contundente capacidad de respuesta a los ataques aéreos provenientes de Gaza restringiría acciones más desafiantes por parte de las milicias. Además, las terribles condiciones socioeconómicas de los cientos de miles de palestinos dentro de ese gueto que es la franja de Gaza frenarían, consideraba Israel, los impulsos de los extremistas.


      Esta situación, más evidentes faltas de la inteligencia israelí, proporcionó al movimiento Hamas un grado de sorpresa que aumentó la letalidad de sus acciones sobre más de veinte ciudades del sur de Israel, asolando, asesinando y secuestrando a la población.


      Dos días después del ataque y de la respuesta, el número de muertos sobrepasa los 2000, y la guerra podría extenderse si en el norte de Israel las poderosas milicias de Hezbollah, el apéndice militar y confesional de Irán en el Líbano, decide escalar los ataques a Israel.


      El rápido ascenso de la violencia es una de las características de una placa geopolítica selectiva. En el mundo hay tres (Europa del este desde el Báltico hasta el Cáucaso; Medio Oriente/Golfo Pérsico y la zona del Indo-Pacífico), en dos de ellas hay guerra, tensión y enorme acumulación militar, y hay actores con armas nucleares. Pero el común denominador de las mismas es que en esas zonas o franjas de fractura una crisis local-regional puede convertirse en continental y mundial.


      Es cierto que la placa de Oriente Medio presenta algunos rasgos muy propios, por caso, el carácter irreductible de algunas de las rivalidades, particularmente en torno a Irán e Israel: ¿cómo imaginar una negociación cuando el primero no sólo no reconoce al segundo, sino que plantea su misma desaparición? Por otra parte, si Israel mantiene un enfoque geopolítico sagrado sobre determinadas tierras, Cisjordania concretamente, resulta imposible considerar escenarios de superación de la violencia, pues jamás los palestinos alcanzarán un Estado independiente y soberano. Por ello, los Acuerdos de Abraham, de septiembre de 2020, sin duda suponen un nuevo orden regional, pero difícilmente será un orden con paz, y los hechos sangrientos de estos días lo evidencian.


      Porque tales acuerdos implican algo así como un pacto que asegura un equilibrio desequilibrante en la región, pues se trata de un pacto que fortalece a actores que construyeron poder, como Arabia Saudita, Turquía, Qatar, pero aísla a otro que también construyó poder, Irán.


      Por ello, como bien sostiene el experto Marcelo Cantelmi, hay un dato clave para comprender el ataque de Hamas, y es que el mismo tendría como propósito sabotear el avance diplomático de Israel con los países árabes.


      En esta línea, George Friedman, director de "Geopolitical Futures", considera que el objetivo de Irán, el actor que respalda y financia a Hamas y Hezbollah, reside en que la reacción militar de Israel a los ataques de Hamas terminará por dejar en una situación incómoda y vergonzante a los árabes, es decir, los obligaría a replantear un eventual acuerdo con Tel Aviv, pues para Teherán (y no pocos sectores del mundo árabe) resultaría casi imposible un acuerdo entre árabes e israelíes que "descarte" la cuestión palestina.


      No ha sido una casualidad que el ataque de Hamas se produjera dos semanas después de las negociaciones entre saudíes e israelíes para alcanzar un acuerdo, las que llevaron a que Mohammed bin Salman, "MbS", príncipe heredero y primer ministro del reino, sostuviera que ambos países estaban cerca del "mayor acuerdo histórico desde la Guerra Fría".


      Hay que recordar que Israel ha normalizado relaciones con Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Marruecos, de modo que un acuerdo con Arabia Saudita cerraría una estrategia que aislaría a un ya presionado Irán (que, sin embargo, ha enriquecido uranio mucho más allá del nivel permitido por las autoridades internacionales, como lo advirtió hace poco el analista Julian Schvindlerman).


      En este cuadro, Estados Unidos, un actor mayor que tras el 11-S se ha ido retirando de la región, sobre todo desde que se convirtió en un gran productor de petróleo y gas de esquisto, es uno de los principales impulsores de un acuerdo saudita-israelí, situación que funge favorable para Riad que aspira a contar con un apoyo mayor de defensa estadounidense, al punto de convertirse Arabia Saudita, si hay acuerdo, en uno de los principales aliados de Estados Unidos.


      El ataque de Hamas también hay que relacionarlo con la pérdida de centralidad que tenía la cuestión israelo-palestina. Durante los últimos quince años han ocurrido nuevas situaciones en la región, desde la guerra en Siria hasta el surgimiento del ISIS, pasando por la ruptura Hamas-Fatah, el retiro de Estados Unidos, el aumento de la presencia diplomática y geoeconómica de China, los acuerdos entre petromonarquías e Israel, etc., hechos que impactaron en el nivel de visibilidad internacional de dicha cuestión.


      Esa pérdida de centralidad se constata en el hecho relativo con que hace medio siglo eran los países árabes (Egipto, Siria) los que atacaban sorpresivamente a Israel. Hoy el ataque lo realiza un movimiento islamista. En cuanto a aquellos Estados, críticos en el Oriente Medio del pasado, uno firmó la paz con Israel mientras que el otro hace más de una década se encuentra en una guerra interna en la que participan múltiples actores.


      Por tanto, si los cambios y la diplomacia redujeron o lateralizaron el reclamo o causa de los palestinos, hay que volver a colocarlo en el centro. ¿Cómo? A través de la violencia extrema. Pero ello, paradójicamente, termina fungiendo “favorable” para  Israel, pues así jamás se podrán hacer concesiones territoriales. En otros términos, no se puede ni se debe cumplir con la Resolución 242 del Consejo de Seguridad, que prevé, precisamente, un intercambio de territorios por paz.


      En este contexto, es difícil trazar perspectivas. De lo que sí podemos estar seguros es que el ataque de Hamas significó un antes y un después en la convulsa placa geopolítica de Oriente Medio.


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lunes, octubre 02, 2023

El Debate Presidencial

 Por Gustavo Ferrari Wolfenson



No acaban de pasar 10 minutos de la finalización del debate
presidencial cuando me siento frente al teclado de la
computadora para tratar de clarificar mis ideas y dentro de la
objetividad que puede dar mi lejanía de la Argentina y verlo a
través de internet, analizar lo que pasó, el papel de cada
participante y las conclusiones finales que me deja.
El país está en un estado de situación como jamás lo ha
tenido en los últimos 60 años, un estado que en tiempos de
nuestros padres y abuelos se solucionaba golpeando la
puerta de los cuarteles y listo.
Pero luego de 40 años de ese rezo laico, nos encontramos
que frente a la pantalla estaban cinco personajes que desde
sus visiones pretenden mostrar que un camino diferente es
posible y tratar de explicar en pocos segundos como lo irían a
hacer.
Sin embargo, el debate no era la pantalla exclusiva que cada
uno suele tener en programas de TV donde lo mediático
muchas veces supera lo racional.
Vimos a un Javier Milei peinado, controlado, sin la posibilidad
de hacer su show explosivo frente a las cámaras y entonces
eso le perdió espontaneidad, perdió naturalidad y salvo el
exabrupto de llamar inútiles al equipo económico de Patricia
Bullrich, llamarla montonera, aclarar con exactitud el número
de desaparecidos y recitar por enésima vez la definición de
liberalismo de Benegas Lynch, su presentación fue plana, sin
nada nuevo que no haya dicho y sin mencionar, en ningún
momento, las dos palabras que han sido su caballo de batalla
durante todos estos meses: motosierra y dolarización.
Sergio Tomás, cumplió a la perfección su papel de vendedor
de autos usados, cara de piedra, tratando de explicar al
público que él no es parte de este gobierno, que llegó a dar la
cara y poner el pecho cuando nadie se atrevía, que los días
de la Argentina popular y peronista están por venir con una
economía abierta que, por falta de energía, no podrá usar
más la maquinita. Otro que estaba contenido, su rosto de
siempre burlón, falluto y sobrador, no se prestaba para
explicar el por qué su gobierno en quiebra, su plan platita, los
niveles de pobreza de su gestión, sí podían poner a
disposición 20 millones de dólares para pagar el divorcio de
un funcionario cercano, al mismo tiempo que con el vuelto
que le quedaba, ese funcionario lucía sus mejores trajes de
baño y bronceados Coppertone en un yate por las aguas del
mediterráneo, muy acaramelado con una influencer
monotributista categoría mínima que dice que todos los lujos
que se puede dar son fruto de su trabajo aun no aclarado.
Creo que ese golpe mediático producto de las aventuras
sentimentales del Jefe de Gabinete provincial ausente, fue
un gancho al hígado que la cara de Sergio Tomás la
evidencio en todo momento sin ninguna posibilidad de aclarar
que “no sabía nada”.
Vayamos ahora a doña Miriam Bregman y su fe
religiosamente atea por las causas populares. Se acordó de
Maldonado, de las madres que salen a hacer piquetes porque
no les alcanzan los planes que les da el gobierno, llamó a la
resistencia popular de una izquierda combativa que tenia en
la antigua confitería La Paz su campo de batalla frente a las
injusticias del FMI, el empresariado, la oligarquía, el VAR no
favorable a Cavani y a Boca el día de hoy durante el clásico y
al relato histórico de los 33 mil desaparecidos. Hay que
reconocer que Miriam fue la que más chicaneó a todos los
candidatos y fue la única que tocó el yategate, a un Sergio
que miró al costado.
Patricia Bullrich se ubicó en su papel de llegar en desventaja
y tener al debate como posibilidad de manejar su discurso,
sus propuestas para sumar puntos. En parte lo logró. Si bien
empezó nerviosa y no tuvo definiciones concretas en el
primer bloque económico, a medida que el debate avanzaba
se fue fortaleciendo con una clara posición en el tema de los
derechos humanos, la educación, el papel de las fuerzas
armadas y de seguridad como garantes de protección de las
ciudadanía, defendiendo al gobernador Morales contra
Milagros Salas, dejando en claro su pasado militante y
resaltando su vieja lucha contra los gordos sindicales, y las
alianzas que alguno de ellos están haciendo con Milei al que
le señaló su desconocimiento de la problemática del interior
del país y lo paró en seco diciéndole “usted no me va a decir
lo que yo tengo que decir.” . Quizá fue la que mantuvo una
línea discursiva más segmentada y prolija, sin anuncios
mediáticos, midiendo cada palabra, pero si resaltando el
concepto que viene utilizando desde hace tiempo que es
construir y cambiar el país con orden.
Por ultimo me referiré a Schiaretti, el gringo de mil batallas y
alianzas, quien me hizo trasladar casi 35 años atrás a la
campaña de Eduardo Angeloz (tres veces gobernador de
Córdoba) versus Carlos Menem. Los puntos de referencias
sólo pasaron por Córdoba y como buenos cordobeses del
fernet y del cuarteto, de Talleres o Belgrano, si se hizo o se
hace en Córdoba, está bien hecho y se puede replicar en
todo el país. Una exposición prolija pero muy local, donde
finalmente dejó en claro que apoyaría en caso necesario a la
corriente que quiera lo mejor para el país.
La Argentina hoy debatió más personalidades que
propuestas. Ya no fueron acusaciones de castas contra
motosierras. Tampoco hubo un ataque frontal al yategate y
solo Patricia, al principio del debate uso la palabra
kirchnerismo. Ninguno de las y los candidatos se detuvieron
a señalar los dos temas que a mi juicio siguen siendo
fundamentales para la convivencia y crecimiento de una
sociedad: empleo y seguridad. De que sirve dolarizar si no
hay fuentes y oportunidades de trabajo formal, de qué sirve
educar si cuando vas camino a la escuela te roban y matan
por lo que llevas en una mochila. De qué te sirve prometer
que vas a volar si las AVES (Alimentación, Vivienda,
Educación y Salud) no tiene alas.
De qué te sirve luchar para aspirar a ser presidente de la
Nación, si la investidura está como hoy pisoteada por un
pusilánime que con su socia procesada, parecen ser testigos
protegidos de lo que ellos mismos crearon para su propia
impunidad.
Hoy fue el primer round, ganaron las mujeres, una por su
licencia acusatoria contra el sistema y la otra por su sentido
de la realidad de un país que necesita construirse sin la
ambición de una nueva pareja matrimonial que llega desde el
Tigre y sin violencia mediática, verbal de un joven que
demostró que sin las luces y cámaras de los set televisivos,
sin gritos e insultos, puede ser un brillante economista
explicando los problemas macro de la Argentina pero aún le
falta ser ese león que quiere comerse al país.

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