martes, noviembre 30, 2010

Noticias de la Ciudad de Bs. As.


   

Futuros posibles ya sin Néstor Kirchner

Por Eduardo Zamorano

Abogado laboralista /master en Inteligencia estratégica por la Univ. Nac. de La Plata.  

Columnista de Construcción Plural, el programa de Fernando Mauri.
Dentro del campo de las ciencias sociales, existe una metodología de análisis denominada PROSPECTIVA; ella consiste en imaginar escenarios futuros, llamados “futuribles”, y en ocasiones determinar su grado de probabilidad.

Cualquiera sea la postura del lector, nadie puede ignorar que el deceso del ex presidente Kirchner provocó un cataclismo político de proporciones.  Ya nada será igual en la administración de Cristina así como respecto a las visiones sobre el porvenir.

A partir de esta circunstancia imprevista, intentaremos construir futuribles en relación a tres situaciones diferentes, a saber:

(i)     La gestión de gobierno durante el último año de mandato de la Presidenta.

(ii)   El reacomodamiento del “Movimiento Peronista” así como los grupos apodados “transversales” que convergen en el kirchnerismo.

(iii) Las chances electorales de oficialismo y oposición para 2011.



LA GESTION

La Presidenta encuentra un avance espectacular en su imagen pública.
Es factible que este notable progreso reconozca componentes sentimentales. Dicho con respeto y a manera de metáfora:

“La viuda heroica que,  ahogando el sufrimiento por la pérdida irreparable de su compañero de vida y militancia, aprisiona el timón con empuje y firmeza”.

Esta percepción de la realidad, en forma espontánea o inducida,  es comprensible que esté  alojada en mucha gente.
Es  verdad que ese elemento predominantemente emocional suele ser efímero; el transcurso del tiempo y las peripecias cotidianas que inevitablemente experimenta la población,  pueden relativizarlo retornando a enfoques más críticos de los gobernantes.

De todas maneras la situación económica, en términos de crecimiento, se presenta auspiciosa ya que los expertos auguran que continuará la demanda externa de productos primarios así como el provechoso intercambio con Brasil.

Este panorama optimista se opaca por el fantasma de la inflación.  Si bien hasta el presente el problema parece controlado y no ha repercutido negativamente en lo político,  una eventual espiralización de los precios de productos y servicios podría trastocar las perspectivas.

La situación regional también se presenta favorable al oficialismo. En efecto, con sus inocultables matices y pocas excepciones (Chile, Colombia y en alguna medida Perú), los gobiernos de nuestros vecinos tienen afinidad con las políticas kirchneristas.  El triunfo de Dilma Roussef es un dato especialmente relevante en este terreno.

Entre los posibles escollos con los cuales puede tropezar Cristina, debe computarse el complejo tema de la inseguridad urbana.
Sería necio e irresponsable negar (o minimizar) el incremento de la criminalidad    -mayorista y al menudeo-   en el ámbito capitalino y el conurbano bonaerense.
Pero, asimismo, configuraría una torpeza adjudicar el flagelo exclusivamente a la administración kirchnerista.  Más aún, tanto desde lo cuantitativo como cualitativo, todavía, estamos lejos de los comandos cariocas, los carteles mejicanos, o las maras de Centroamérica.
Sin embargo, las señales de alarma están encendidas.  La dualización social, la anomia generalizada y un aparato de seguridad ineficiente alimentan el fenómeno y nos colocan en el camino más peligroso.

Algunos analistas visualizan una posible “radicalización” del curso del gobierno. Nos resulta improbable que se adopte una orientación de esa índole; antes bien, es previsible que ciertas acciones continúen pero sin tanta exacerbación (vrcia la “guerra” con el multimedio Clarín), otras se suspendan hasta las elecciones (el proyecto de “participación en las ganancias” de Moyano y Recalde), y algunas directamente ingresen al freezer por tiempo indeterminado (  “la puja” con la Corte Suprema, fruto de ciertos pronunciamientos urticantes para el gobierno).


EL JUEGO POLITICO

Cristina y su entorno más próximo dan claras señalas que no habrá “UN” reemplazante para la urdimbre política que Néstor concentraba con obsesión.  No hay margen y/o candidatos con el pinét necesario para  “regentes” como Richelieu.

Ello obedece a razones bastante obvias. En primer lugar la dificultad objetiva para encontrar alguien sagaz y trabajólico como Kirchner para quién la rosca política era casi un modo de vida. En segundo término, si apareciera un portento similar se plantearía una rivalidad con la presidenta, ahora agravada por la inexistencia del vínculo matrimonial donde EL PODER era un bien ganancial. Por último, los estrategas oficiales   -más allá del dolor y la tristeza que aún perduran en el núcleo de acero kirchnerista-    advierten que la abrupta desaparición del astro rey, lejos de favorecer a los opositores, desbarató la rudimentaria táctica del emblocamiento parlamentario, pulverizó su precaria cohesión con vistas a un hipotético balotage, y engordó las irreductibles vanidades de sus líderes llegando hasta el ridículo.

¿Cuál sería, entonces, la ganancia de propulsar un clon de Néstor?

Un asunto más complejo es el equilibrio entre diversas ramas kirchneristas.
Cristina no se apartará del proverbial pragmatismo de su difunto marido: el soporte principal seguirá siendo ese conglomerado original que agrupa: sindicatos, gobernadores, intendentes y punteros.  Este sector, pese a estar menos susceptible e ideologizado en comparación con otras épocas, no sale de los márgenes de “la patria peronista contenida en las Veinte Verdades del General”.

Pero recostarse en el “movimiento” fiel a la ortodoxia,  requiere una maniobra fina y sutil: no desairar a los organismos de derechos humanos, las organizaciones sociales piqueteras, y sobre todo a los nuevos y promisorios contingentes juveniles

A nuestro entender, este es el desafío mas arduo porque, a diferencia de los inefables “muchachos”,  en estos grupos hay un fuerte componente ideológico, así como cierta impaciencia inherente a la militancia joven y reciente.

De todas formas, Cristina aprendió la lección de la historia: no habrá trasvasamiento generacional ni formaciones especiales.
Es probable que mimetizándose en el juego pendular del General, le diga a cada uno lo que quiere oir….por el momento.


LAS ELECCIONES

La encuestadora Management & Fit adjudica a Cristina un 56% de imagen positiva, dato singular si pensamos que un año atrás le asignaba solo un 20%.

Debe puntualizarse que antes del impacto popular masivo causado por la muerte de Néstor,  la imagen de la Presidenta venía subiendo, de manera lenta pero sostenida, al punto de superar el 30% en julio del corriente.
Este salto de popularidad favorable se traduce en una intencion de voto cercana al 45%.
(Fuente: Revista Noticias del 20/11/2010).

Aunque no sería correcto efectuar una proyeccion lineal a la fecha del próximo comicio, si la Presidente buscara la reelección, estos guarismos le permitirían ganar cómoda en primera vuelta.
Por lo demás, las mismas encuestas asignan una paupérrima intención de voto a los principales referentes de la errática oposición (Cobos, Macri, Alfonsín, Duhalde, y Pino Solanas).

Hay otro elemento que fogonea las chances reeleccionistas de Cristina.  En la segunda parte de este trabajo, titulada: “¿NACE LA JOTAKA?”, dimos cuenta del fenómeno que se expresa en crecientes adhesiones juveniles al oficialismo.

En este sentido y siempre buscando anticipar posibles escenarios electorales,  la Dirección Nacional Electoral proporciona estos datos: los ciudadanos comprendidos entre los 18 y los 35 años representan el 33% del padrón actualizado, lo que en números concretos significa ocho millones de votos.


Finalmente, hay otra variable que no puede descartarse: si la oposición persiste en trabar los proyectos gubernamentales en el Parlamento, la Presidenta encontraría un pretexto, dotado de cierta solidez y razonabilidad,  para adelantar las elecciones procurando eludir la posible erosión de sus actuales índices de aprobación.

Conviene recordar que la táctica proselitista utilizada por el matrimonio Kirchner para la elección presidencial de 2007, consistió en generar la sensación de que Cristina sería la arquitecta de la “institucionalidad”.
En efecto, respaldándose en el piso inamovible del 30% que se le reconoce al peronismo en cualquiera de sus variantes, las usinas oficiales instalaron este concepto direccionado al electorado independiente:

“Nestor encontró un país devastado, y alcanzó la presidencia con tal solo el 22% de los sufragios. Esta anomalía de origen, lo obligó a reconstruir el poder y autoridad presidencial a cualquier costo, incluso asumiendo desprolijidades y gestos autoritarios.
Pero ya logrado el objetivo, con Cristina comienza una etapa de moderación y equilibrio, en la cual se pondrán los acentos en la consolidación de las instituciones republicanas”.

Ya con Cristina instalada en el sillón de Rivadavia,  los hechos objetivos evidenciaron que lo anterior no pasaba de un efectivo eslogan de campaña.

Los buenos resultados de 2007 estimulan una reproducción, corregida y adaptada, de aquella metodología;  ello permite vislumbrar una Cristina de aspecto sereno, buscando el perfil de “estadista”, distante de las miserias de la política cotidiana, y levantando, siquiera parcialmente, la ofensiva de confrontación que signó los últimos días de su marido.

Cuantitavo - Cualitativo XIII

A poco menos de un año de la elección de 2011, y entre tanto número de dudosa fiablilidad que circula tras la muerte de Néstor Kirchner mensurando el efecto "estado de gracia" en la Opinión Pública para con la presidente CFK -quien escenifica estratégicamente a diario un duelo público- esta es una variable cuantitativa de la muy seria consultora Graciela Römer y Asoc.



NOVIEMBRE - ALZA DE LA IMAGEN PRESIDENCIAL

53.8% opina bien o muy bien de CFK. ALZA DEL 14%
22.4% opina mal de CFK. CAIDA DEL 19.4%
PRECANDIDATOS ELECC. 2011

CFK 41%
Mauricio Macri 18%
Ricardo Alfonsín 14%
Pino Solanas 10% 
NO SABE: 12%.

domingo, noviembre 28, 2010

Acerca del optimismo de Krugman sobre Argentina

Por Pedro Andrieu (Profesor titular consulto de la UBA / ex secretario de Estado / ex consultor de organismos multilaterales).
Columnista de Construcción Plural

Días pasados, en su visita a Bs. As., Paul Krugman, de quien soy devoto seguidor, se mostró optimista sobre la Argentina.
Quizás, como cada uno sabe dónde le aprieta el zapato, Krugman sea demasiado indulgente en su mirada sobre el presente y futuro de nuestro país porque parte del supuesto de que Argentina -como Brasil y otros paises- no fue afectada por la crisis como EE.UU. y naciones de la Union Europea.
Quizás además Krugman no esté al tanto de la magnitud y naturaleza de la distorsión de los datos del INDEC y ello lo lleve a no apreciar debidamente los problemas estructurales ni del manejo del gobierno ni de la política argentina.
Posiblemente Krugman no sabe cuál es la cifra real de desempleo y la verdadera pobreza, datos estructurales, que son muy superiores a los que puede haber registrado EE.UU. aún en su peor momento histórico.
En Argentina, la esperanza se pierde ya que aquí comenzamos por no reconocer y por negar los problemas, en tanto nada coherente se piensa ni se hace para solucionarlos a fondo, lo cual por otro lado siempre requeriría un tiempo considerable. La inestabilidad cultural de nuestra sociedad tampoco ayuda.
Krugman debe pensar que las cosas son más fáciles aquí en Latinoamérica con varios gobiernos de hecho autoritarios, que no cuentan con las restricciones que representa el Congreso de EE.UU. para el manejo presupuestario y fiscal, ni poseen la real autonomía del Banco de la Reserva Federal en el manejo de la politica monetaria, y hasta donde es posible, de la tasa de cambio.
Se suma a ello la actual actitud social populista/falsamente progresista en algunas poblaciones latinoamericanas, que resulta completa y profundamente diferente de la postura conservadora anti Estado y anti déficit fiscal que prevalece hoy en las clases medias de EE.UU. y de los principales paises de la Union Europea.

Y todavía más aún, los superávits fiscal y del sector externo que en Argentina genera China básicamente, pais que para EE.UU. como contracara supone su fuente principal de problemas.
A pesar de la historia que ya lleva más de 60 años de inflaciones e hiperinflaciones que condujeron a las consecuentes crisis, en nuestro país pareciera que en general no se reconoce suficientemente el riesgo de la espiralización inflacionaria, ni consecuentemente el de una crisis por ese lado.
Además, como no se vizualiza una crisis fiscal ni del sector externo como las que estuvieron siempre entremezcladas y recíprocamente interalimentadas con las inflacionarias, pareciera que aquí asiste la convicción generalizada de que el riesgo inflacionario no existiera o no fuera importante.
Es evidente que la inflación va incrementando el atraso cambiario, y si bien eso podria solucionarse o morigerarse con una rebaja de las retenciones que beneficiaría a los sectores afectados por éstas, ello por un lado disminuiría el superávit fiscal y asimismo tendría nulos efectos sobre los demás sectores exportadores, y aún tendría también un impacto inflacionario interno.
Mientras, el otro efecto de la inflación con tasa de cambio fija o muy atrasada consiste en abaratar las importaciones, a un cierto punto aún de bienes de consumo (sino, preguntarle al secretario G. Moreno y sus intervenciones de facto...), con su efecto negativo sobre la actividad productiva orientada al mercado interno, y sobre el respectivo nivel de empleo, como ya sucedió en la convertibilidad.   
Las cosas no son tan fáciles en Argentina como podría  parecer a primera vista desde la mirada de Krugman, por lo cual, muy lamentablemente, y a pesar de cómo se ven las cosas hoy, uno bien tendería a tener más confianza en que a mediano plazo se solucionen los problemas en EE.UU. y la UE que en que nuestro pais se encamine definitivamente en una senda de crecimiento económico con seguridad y mejora social, continuo y sostenible en el tiempo, sin crisis ni bruscos cambios de rumbo, como ha sucedido y sucede en Chile, Brasil y Uruguay, y como es imprescindible según la experiencia universal, para dar, gradualmente, saltos importantes hacia adelante, en relación al mundo, y a los países vecinos.
Ojalá uno se equivocara en su percepción... estaria muy contento de que así fuera. 
 

Vuelve el FMI

Por Julio Gambina (Prof. de Economía política en la Univ. de Rosario / miembro de CLACSO).
Columnista de Construcción Plural 

Entre el canje, el club de París y el arreglo con el FMI se va
cerrando el círculo de la política gubernamental en torno de la deuda externa pública y la finalización de la cesación de pagos declarada a fines del 2001.
El objetivo apunta a reinsertar al país en el mercado internacional de préstamos. Un interrogante es si la Argentina necesita hoy del  financiamiento externo. Es una pregunta pertinente que surge de pensar las consecuencias históricas del endeudamiento, aún con tasas internacionales tan bajas, similares a las que generaron el gran endeudamiento de los años 70´ y que derivara en el problema del endeudamiento que condicionó a cada turno constitucional desde 1983, incluido el presente periodo gestionado por Cristina Fernández.
Existen importantes reservas internacionales y saldos favorables en el comercio internacional y las cuentas fiscales. El horizonte es de crecimiento económico para el presente y próximo año, pero aún así, los inversores internacionales condicionan el ingreso de sus capitales
al país, si se normaliza la situación con el sistema financiero
internacional. Así, regularizar los pagos, no es solo una demanda de los acreedores, sino también de los capitales excedentarios que buscan rentabilidad rápida en un marco de continuidad de la crisis mundial con epicentro en el centro capitalista.
Por ello es que las novedades vienen en estas horas por la renovación de las relaciones con el Fondo Monetario Internacional. La motivación es el INDEC, o quizá, el abordaje sobre uno de los principales problemas económicos de nuestro tiempo en el país: la inflación.
Lo concreto es la contribución profesional del Fondo en la elaboración de un índice de precios, en el mismo momento que se difunde la crítica evaluación universitaria a la información estadística oficial. Una opinión ofrecida por la academia argentina sobre la consulta realizada
por el Ministerio de Economía. Vale preguntarse por qué no se derivó en técnicos y profesionales locales, con aval en prestigiosas universidades públicas, la tarea que se le confía ahora al FMI. La respuesta puede encontrarse en la tríada articulada entre el canje de la deuda, las negociaciones con el Club de París y la reinserción del Fondo en el país.
Bien puede sostenerse que la esencia del problema se explica producto de una política coherente con la participación argentina en el G20 y que demanda resolver el default y normalizar el vínculo local con el mercado financiero mundial, donde el organismo internacional cumple un papel destacado, especialmente asignado para atender la crisis por parte de los presidentes del G20.
Se puede argumentar que el país cerró el ciclo económico de la crisis recesiva de 1998 a 2002, con un crecimiento desde el 2003, que se ratifica en el presente año y convalidado conceptualmente, nada menos que por Paul Krugman, el Premio Nobel de Economía del 2008, que ante empresarios locales elogió la situación de la economía nacional. La
asignatura pendiente, se entiende, es que esa evaluación sea realizada por el sistema mundial, en momentos de recrudecimiento de una crisis global que no termina de esfumarse, y al contrario, reaparece en diferentes territorios, ahora Irlanda. La idea de la “normalización” del orden capitalista fue un propósito explícito del mensaje presidencial inaugural en la era Kirchner en mayo del 2003, razón por lo cual se sostenía que no se trataba de un gobierno del default, que la búsqueda apuntaba a reinsertar al país en
la economía mundial y que para ello había que superar la situación de cesación de pagos. Lo curioso es que el conflicto con el FMI se explicita en el mismo momento que empieza a perfilarse una disparada de los precios.
En efecto, el pago anticipado al Fondo por 9.500 millones de dólares ocurre inmediatamente luego del canje de deuda del 2005 y el reemplazo de Roberto Lavagna en el Ministerio de Economía para abordar la nueva etapa que empezaba a mostrar el rebrote inflacionario. Allí se inició una política de acuerdos de precios con empresarios, con el objeto de
controlar y frenar las subas y que a tiempo vista se muestra limitada.
Debe sumarse al análisis la creciente normalización de negociaciones salariales, como parte de una puja social en la  distribución del ingreso. Claro que afuera de esos acuerdos queda el sector informal o no regularizado que expresan los tercerizados y flexibilizados en el mercado laboral.
Ahora se intenta nuevamente remedar un pacto social, entre
trabajadores y empresarios mediados por el poder ejecutivo. Para los empresarios el problema pasa por las demandas de aumento salarial y para los trabajadores el tema central es la carestía de la reproducción de la vida cotidiana.
Por eso, más allá de la cuestión técnica que supone la presencia del FMI en la elaboración de un nuevo índice de medición inflacionaria, lo determinante es el crecimiento de los precios, especialmente de la canasta alimentaria, conjunto de bienes que afectan a los sectores de
menores ingresos, entre ellos, los beneficiarios de las principales políticas sociales compensatorias, como la asignación universal.
En la estrategia gubernamental se reconoce la necesidad de asociar la normalización de relaciones con el FMI a las asignaturas pendientes que suponen la deuda y la inflación.

viernes, noviembre 26, 2010

Guillermo CARRACEDO en CONSTRUCCION PLURAL

Diálogo con nuestro columnista Guillermo CARRACEDO, economista y titular de la consultora CADEC S.A.

"La oposición cometió el error de no poner blanco sobre negro el Presupuesto. Debió decir: aprobamos el Presupuesto tal como lo manda el PEN, pero los excedentes tienen que venir al Congreso como Cámara controladora. Debió impulsar agregar un artículo para que los excedentes fueran al Parlamento. En este caso, el Gobierno iba a vetar porque lo que busca el Gobierno es escapar al control, especialmente en un año electoral. El tema era los excedentes, no el Presupuesto enviado en sí, que se podría haber a aprobado a libro cerrado. El Gobierno buscó desviar el tema del debate presupuestario, se mezcló las acusaciones de compra de votos, pero el único tema del que debió hablarse fue del control de los excendentes de recaudación".


“Nada ha cambiado. Siempre el Club de París ha dicho que sino participa el FMI en las negociaciones, se deben realizar pagos al contado, o sea, en el corto plazo, máximo 2 años. Pero si Argentina pretende estirar pagos -como debería teniendo en cuenta su situación y la situación internacional- el Club de París le va a decir de nuevo que no”.


"Uno ya sabe cómo se negocia con estas entidades supranacionales. Pagarle en el corto plazo al Club de París sería repetir la historia del pago al FMI que realizó en su momento Néstor Kirchner".

"Entrar en default, lo he escrito, fue tener de 10 años de parate mínimo de financiamiento. Y cuanto más sangrienta fuera la quita, más difícil iba a ser volver a los mercados internacionales. Y ya no sólo para el Gobierno, también para el empresariado recibir préstamos. Al perjudicar a los acreedores con una quita enorme, no llegan inversiones productivas y la falta de esas inversiones después generan la inflación que vemos hoy por disponer de menos oferta para hacer frente al crecimiento".

"La deuda argentina en proporción era parecida a la que tenían Brasil, Uruguay y Perú en su momento. Y estos países no fueron al default, fueran pagando constantemente y renegociando todo. Aparte, el grueso de los bonos de la deuda de nuestro país estaba en manos de argentinos (AFJP o inversores particulares). Hoy, cuando el Gobierno dice tengo 50 mil millones de dólares menos de deuda, es porque le robó de alguna forma a los argentinos 35 mil millones".

Noticias de la Ciudad de Bs. As.

El oasis de Suipacha 
Pese a la falta de costumbre y la intromisión de varios motociclistas en las ciclovías, la peatonalización de la calle Suipacha agrada a los vecinos, quienes se sienten más cómodos y tranquilos.

GCBA - Ordenan restablecer las llamadas a celulares
La justicia ordenó el "inmediato restablecimiento" de las llamadas a teléfonos celulares desde escuelas y hospitales porteños.

miércoles, noviembre 24, 2010

Revistas políticas al día

Noticias de la Ciudad de Bs As

lunes, noviembre 22, 2010

Noticias de la Ciudad de Bs. As.

 
 

 


 
 
 

viernes, noviembre 19, 2010

La Superintendencia de Riesgos del Trabajo financia al Estado


La Superintendencia de Riesgos del Trabajo otorga crédito al Estado nacional con los recursos del Fondo de garantía para supuestos de insolvencia patronal

Por Horacio Schick - Titular del Estudio Schick - docente de posgrado de la Maestría en Derecho del Trabajo y Relac. Internacionales de la Universidad de Tres Febrero



I.- Letras de tesorería con los recursos del fondo de garantía administrado por la SRT
En el Boletín Oficial del día 24 de noviembre de 2008 fue publicada la Resolución Conjunta Nº 38/08 de la Secretaría de Finanzas y Nº 314/08 de la Secretaría de Hacienda cuyo texto en su parte pertinente dice:
Bs. As., 18/11/2008
CONSIDERANDO:
Que la Ley de Administración Financiera y de los Sistemas de Control del Sector Público Nacional Nº 24.156 y sus modificaciones, reguló en su Título III el Sistema de Crédito Público, estableciéndose en el Artículo 60 que las entidades de la Administración Nacional no podrán formalizar ninguna operación de crédito público que no esté contemplada en la ley de presupuesto general del año respectivo o en una ley específica.
 “Que ante la propuesta de las autoridades de este Ministerio efectuada en el marco de la programación financiera para el presente ejercicio, la SUPERINTENDENCIA DE RIESGOS DEL TRABAJO, organismo en la órbita de la SECRETARIA DE SEGURIDAD SOCIAL del MINISTERIO DE TRABAJO, EMPLEO Y SEGURIDAD SOCIAL DE LA NACION, ha resuelto suscribir una LETRA DEL TESORO a NOVENTA (90) días de plazo”.
“Que por el Artículo 3º de la Resolución Conjunta Nº 205 de la SECRETARIA DE HACIENDA y Nº 34 de la SECRETARIA DE FINANZAS de fecha 5 de junio de 2007, ambas del MINISTERIO DE ECONOMIA Y PRODUCCION, se aprobaron las normas de procedimiento para la colocación y liquidación de los títulos de la deuda pública a realizarse en el mercado local, que obran como Anexo a la misma.”
Por ello,
EL SECRETARIO DE HACIENDA Y EL SECRETARIO DE FINANZAS
RESUELVEN:
Artículo 1º - Dispónese la emisión de una LETRA DEL TESORO EN PESOS con vencimiento el 18 de febrero de 2009 por un monto de PESOS VALOR NOMINAL TREINTA Y TRES MILLONES ($ V. N. 33.000.000), de acuerdo con las siguientes características:
Fecha de emisión: 20 de noviembre de 2008.
Forma de colocación: suscripción directa por parte de la SUPERINTENDENCIA DE RIESGOS DEL TRABAJO, organismo en la órbita de la SECRETARIA DE SEGURIDAD SOCIAL del MINISTERIO DE TRABAJO, EMPLEO Y SEGURIDAD SOCIAL DE LA NACION, en el marco de lo establecido en las normas de procedimiento aprobadas por el Artículo 3º de la Resolución Conjunta Nº 205 de la SECRETARIA DE HACIENDA y Nº 34 de la SECRETARIA DE FINANZAS de fecha 5 de junio de 2007, ambas del MINISTERIO DE ECONOMIA Y PRODUCCION.
Plazo: NOVENTA (90) días.
Tasa de interés: la tasa nominal anual será fijada en función de la tasa de corte de la licitación de LEBAC a tasa fija efectuada por el BANCO CENTRAL DE LA REPUBLICA ARGENTINA a un plazo similar a un trimestre, en la fecha previa más cercana a la suscripción.
Amortización: íntegra al vencimiento.
Como puede observarse se trataba de una operación de crédito público del año 2008, mediante la cual la SRT le presta al tesoro nacional mediante la emisión de un título publico, llamado letra de tesorería, la suma de 33.000.000 millones de pesos a un plazo de 90 días.
Esta colocación fue a su vez renovada por primera vez en Diciembre de 2009, y nuevamente el 17 de Agosto del 2010 con fecha de vencimiento el 17 de Agosto de 2011 por la suma de $ 42.000.000. (cuarenta y dos millones de pesos) utilizando la tasa de interés de corte de las “Lebac” a 180 días, amortizándose el capital íntegro al vencimiento[1].
Cabe señalar que estos préstamos al Estado Nacional son parte de una política gubernamental de financiar al Tesoro Nacional a través de préstamos que distintos entes estatales. Así en las emisiones de deuda publica junto a la SRT figuran como fuente de financiamiento con diferentes montos y vencimientos, los siguientes entes: Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP); Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES); Fondo Fiduciario de Recuperación de Empresas (FFRE); - LOTERIA NACIONAL S.E.; - Fondo Fiduciario de Refinanciación Hipotecaria (FFRH); Fondo Fiduciario Federal de Infraestructura Regional (FFFIR); - Instituto Nacional de Reaseguros – en liquidación (INDER - EL); - Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE); Instituto de Ayuda Financiara (IAF); Fondo Fiduciario de Infraestructura de Transporte (FFIT); Agua y Saneamientos Argentinos (AySA); Programa de Asistencia Medica Integral (PAMI); Administración General de Puertos (AGP SE); Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS);
Es decir que -como es de público conocimiento- el Estado Nacional ha recurrido a esta fuente de financiamiento para solventar sus obligaciones generales y cancelar su deuda pública. Así, se contrae deuda con las diversas reparticiones estatales, en vez de recurrir por ejemplo al mercado voluntario de capitales, como efectúan otros países, lo que produce distorsiones, porque se extraen recursos que tienen fines específicos, como es el caso paradigmático de la ANSeS, lo que repercute negativamente en la disponibilidad de recursos de cada repartición con relación a sus fines específicos. Esta modalidad de endeudamiento interno es cuestionada por diversos especialistas, aunque defendida y sostenida ‘a rajatabla’ por el Gobierno.
A lo dicho cabe señalar que la tasa de interés con el que se emite la letra de tesorería en pesos, equivale a la fecha, aproximadamente, al 11% de interés anual, de modo que si tenemos en cuenta que la inflación real estimada por distintos especialistas privados oscila en torno al 25% anual, puede verificarse que la operación financiera, en definitiva, produce una licuación parcial del fondo de garantía.

II. Uso discrecional del Fondo. Opción y valoraciones
Ahora bien, en este contexto, causa cierta perplejidad que esta misma política de préstamos al tesoro nacional se haya adoptado ya como una política permanente respecto de los Fondos de Garantía que administra la SRT destinándose sumas relevantes a fines muy distintos de aquellos a los que la Ley de Riesgos del Trabajo asigna, con funciones específicas, al ente de regulación y control.
 En este sentido, cabe recordar que el artículo 36 de la LRT dispone que la SRT tendrá las funciones que esta ley le asigne y, en especial, las siguientes:
a) Controlar el cumplimiento de las normas de higiene y seguridad en el trabajo, pudiendo dictar las disposiciones complementarias que resulten de delegaciones de esta ley o de lo Decretos reglamentarios;
b) Supervisar y fiscalizar el funcionamiento de las ART;
c) Imponer las sanciones previstas en esta ley;
d) Requerir la información necesaria para el cumplimiento de sus competencias, pudiendo peticionar órdenes de allanamiento y el auxilio de la fuerza pública;
e) Dictar su reglamento interno, administrar su patrimonio, gestionar el Fondo de Garantía, determinar su estructura organizativa y su régimen interno de gestión de recursos humanos;
f) Mantener el Registro Nacional de Incapacidades Laborales en el cual se registrarán los datos identificatorios del damnificado y su empresa, época del infortunio. Prestaciones abonadas, incapacidades reclamadas y, además, deberá elaborar los índices de siniestralidad;
g) Supervisar y fiscalizar a las empresas auto aseguradas y el cumplimiento de las normas de higiene y seguridad del trabajo en ellas.
A su vez según el artículo 33 de la ley dispone que la SRT tiene a su cargo la administración del Fondo de Garantía de la LRT destinado a abonar las prestaciones de la ley en caso de insuficiencia patrimonial del empleador, judicialmente declarada.
El Artículo 10º del decreto 4911/97 establece que la administración del Fondo de Garantía será gestionada por la SRT para lo cual podrá invertir los mismos en depósitos a plazo en bancos habilitados a recibir inversiones y en títulos públicos nacionales
Pero también el inciso 4º del artículo 33 de la LRT establece expresamente que: “Los excedentes del fondo, así como también las donaciones y legados al mismo, tendrán como destino único apoyar las investigaciones, actividades de capacitación, publicaciones y campañas publicitarias que tengan como fin disminuir los impactos desfavorables en la salud de los trabajadores”.
El art. 11 del Decreto 491/97 reglamentario del referido artículo 33 de la ley, también señala que: a) Los excedentes que se determinen al finalizar cada período, así como los recursos provenientes de donaciones y legados, deberán destinarse a financiar las siguientes actividades:
I. Desarrollo de campañas publicitarias en medios masivos de comunicación, pudiendo solventar publicaciones y otros modos de comunicación sobre los beneficios de la prevención de accidentes de trabajo.
II. Desarrollo de actividades de capacitación, general y particular, sobre la temática de los riesgos y prevención de los accidentes de trabajo.
III. Financiación de actividades y proyectos de investigación sobre riesgos derivados del trabajo y su prevención, desarrollo de sistemas de información sobre las contingencias producidas, fortalecimiento institucional de los organismos de control y supervisión del sistema.
b) La ejecución de las actividades financiadas por los excedentes del Fondo de Garantía podrá efectuarse en forma directa o mediante convenios que la SRT realice con instituciones especializadas, nacionales o internacionales, públicas o privadas, especializadas en la materia y con reconocida trayectoria.
c) Los excedentes no utilizados en el curso de un ejercicio podrán ser ejecutados en ejercicios posteriores.
Esta claro que el destino de fondos de la SRT hacia un crédito público al Estado Nacional no corresponde a estas últimas funciones específicas prescriptas por la ley.
La SRT como administradora del Fondo de Garantía está facultada para efectuar inversiones públicas, pero de ninguna manera obligada a efectuarlas. Y, por otro lado, sí está obligada a cumplir con las demás obligaciones previstas en el artículo 11 del decreto 491/97 transcripto.
Algún observador desprevenido podría afirmar que no es inconveniente ubicar excedentes de fondos acumulados en una colocación financiera relativamente segura como lo es el gobierno nacional.
Aun desconociendo las obligaciones del artículo 11 del decreto 334/97, esta afirmación sería sustentable si tuviéramos un sistema de riesgos de trabajo que funcionara en forma adecuada y si existiera un cumplimiento efectivo de los objetivos que la propia LRT estableció en su momento como el de reducir la siniestralidad laboral y aumentar la prevención de los riesgos. Es decir que no se necesitaría más inversión de recursos en prevención y en la mejora del funcionamiento del sistema.

Continuar leyendo aquí.


jueves, noviembre 18, 2010

G. CAMAÑO: Esa mujer

Por Eduardo Zamorano

Abogado laboralista /master en Inteligencia estratégica por la Univ. Nac. de La Plata.  

Columnista de Construcción Plural, el programa de Fernando Mauri.
  
 
Esta mañana me desperté pensando en el cuento de Walsh: “ESA MUJER”, sobre las macabras peripecias del cadáver de Evita, el cual leí hace demasiados años.
¿Qué diablos se me dió por pensar en eso cuando en la oficina me esperaban, acechantes, “una contestación de agravios”, “un alegato”, y otras menudencias jurídicas por el estilo?
Ante un pensamiento mañanero, intruso y desconcertante, siguiendo las instrucciones de mi psiquiatra, busqué la explicación en los sucesos vividos la noche de la víspera. Antes de dormir y ya acunado por Morfeo, vi borrosamente la sesión en la “comisión de asuntos constitucionales (¿!!!) de
la Honorable (¿!!!) Cámara de Diputados de la Nación Argentina” que culminó con el soberbio sopapo (como decía mi abuelo) que la presidenta de la misma
le propinó a un diputado.
La protagonista estelar del insólito episodio, Sra Graciela Camaño, es una “self made woman”; en efecto, proveniente de una familia humilde, munida tan solo de un título secundario obtenido con esfuerzo en una escuela nocturna, consiguió empleo en la Delegación San Martín del Ministerio
de Trabajo; allí, como escribiente a cargo de las audiencias, conoció a un promisorio y ambicioso sindicalista gastronómico, Luis Barrionuevo. Luego de un breve noviazgo, se casaron y, cosa rara en gremialistas veteranos con buen pasar, proclives a renovar sus cónyuges por modelos más modernos, el matrimonio perdura hasta hoy.
Camaño no se contentó con ser la esposa del mandamás de los mozos y cocineros. Tampoco, a diferencia de lo habitual en las consortes o similares de los capos sindicales, con administrarle la obra social u otros negocios conexos. Empeñosa y perseverante, continuó su militancia en el peronismo, fue consejal y diputada, e incluso ocupó el cargo de Ministra de Trabajo, con aceptable desempeño y en un momento sumamente difícil por el cataclismo de fines de 2001.
El co-protagonista del sainete, Carlos Kunkel, alcanzó notoriedad como dirigente de la “JOTAPE” en los dorados setenta. En aquél momento, era el número uno de su Regional Buenos Aires, alcanzó entonces una diputación
pero renunció disconforme con la orientación que Perón le estaba dando a su tercer gobierno.
En aquella época lejana en el tiempo aunque no en los recuerdos, fue el jefe político de un jóven estudiante de abogacía que, años después, alcanzó la primera magistratura del país y todavía no hace un mes que falleció
prematuramente. El investigador Ceferino Reato, en su libro “Operación Primicia”, arriesga -basado en fuentes que no identifica- que Kunkel habría encabezado uno de los pelotones montoneros que atacaron el regimiento de infantería de monte en Formosa, en el año 1975.

No comparto la orientación política de Camaño y reconozco mis prejuicios hacia ella por estar casada con un sindicalista de pésima reputación. También deploro su agresivo desborde que agrega una mancha más a una institución peligrosamente desprestigiada.
Empero, me inclino ante su laboriosidad (la revista especializada “El Parlamentario” la premió hace dos años por su contracción al trabajo y sentido de la responsabilidad como diputada), saludo la fidelidad hacia su esposo, y reverencio sus agallas para enfrentar a un grandote con pose sobradora y arrestos de matón.

Revistas políticas del fin de semana