Diálogo con el politólogo y sociólogo MARCOS NOVARO, por Radio Cultura: “Para la UCR y el PJ está el problema de cooperar y no terminar pagando todos los costos frente a quien no coopere, frente a quien haga una competencia desleal frente a los cooperadores. El otro riesgo es el aislamiento: que en un proceso de fragmentación política el Gobierno se debilite pero no haya una mayoría ya formada alternativa y no haya nadie que sea suficientemente responsable como para ver que el proceso político puede seguir agudizando la crisis económica. Si se da la primera situación es probable que algunos posibles aspirantes a suceder al kirchnerismo paguen costos. Tal vez Julio Cobos quede más pegado a (Néstor) Kirchner que Carlos Reuteman. Sería una situación bastante similar a lo que sucedió con Antonio Cafiero frente a Raúl Alfonsín que favoreció a Carlos Menem. Pero también puede darse una situación más parecida al del final de la convertibilidad donde todos saben que hay que hacer una política de ajuste pero nadie tiene ni los recursos políticos ni la responsabilidad suficiente como para hacerla y por lo tanto todos esperan que los costos los paguen los demás y eso puede ser una situación tal vez más riesgosa que los costos no los van a pagar algún dirigente político sino todos (los argentinos)”.
“Socializar los costos es una tentación muy grande del oficialismo porque ellos aspiran a seguir siendo la opción progresista, no les importa ser minoría pero quieren seguir siendo la opción progresista. Esto para un gobierno puede ser el modo de justificar una enorme irresponsabilidad que es “bueno, el ajuste háganlo ustedes porque ustedes ganaron la elección”. El kirchnerismo tiene que seguir gobernando, tiene que seguir tomando decisiones consistentes en términos de política fiscal. Como se niegan a hacerlo delegan al Congreso la responsabilidad de manejar que decisión toman con las retenciones. No se si tirarle la pelota al Parlamento les terminará resultando, pero es una tentación muy grande. Creo que no porque en el Congreso todos saben más o menos que juego están jugando, no es que son tan ingenuos como para hacerse cargos ellos de por ejemplo lo que está sucediendo con las tarifas, con la suba de precios y con los problemas del pago de salarios a las provincias. Puede suceder que a esa responsabilidad del Gobierno la oposición responda con más irresponsabilidad, por ejemplo tirara abajo el decreto del aumento del gas puede ser una decisión justificada, porque no se puede no aumentar el gas durante 6 años y después aumentarlo al 400 %. Eso es muy irrazonable pero tirar abajo el decreto puede significar que el Estado deje de pagar todas las obras de servicios y eso puede tener consecuencias para muchas provincias. Creo que la oposición tiene que encontrar la forma de no hacerle el juego al gobierno, en este caso decir por ejemplo que no van a avalar el decreto pero vamos a proponer una alternativa que es aumentos paulatinos del gas, con las retenciones pasa lo mismo, ellos pueden reaccionar a la ceguera del oficialismo que se niega a tocar las retenciones con una política más responsable o con irresponsabilidad. Va a ser difícil que todas las fuerzas opositoras se pongan de acuerdo y eviten la conducta más fácil que es decir que este gobierno está suicidándose y nosotros no vamos a ser parte del ajuste”.
“Es probable que entre los escenarios deseables para Kirchner esté ese de que es mejor que el peronismo pierda en 2011 porque es más fácil imaginarse para Kirchner el poder quedarse con un pedazo, que su alianza con (Hugo) Moyano y con Carta Abierta las puede conservar mientras al peronismo le vaya mal. Esa es una idea fuerte en Kirchner y ante esa idea muchos peronistas pueden reaccionar con mucha irresponsabilidad y entonces es mejor que el gobierno termine ya porque si van a llevarnos a un callejón sin salida, nosotros podemos adelantar esta apuesta y entonces el gobierno se va a volver inviable ya, a fin de año y las consecuencias y los costos los va a pagar el gobierno y eventualmente Julio Cobos que tendrá que asumir en su lugar. Ahí se empieza a armar un juego que nadie quiere jugar pero que se ven
obligados a jugar. Ni Reuteman ni Cobos son gente irresponsable pero pueden terminar jugando un juego irresponsable. Porqué regalarle a Kirchner la idea que el se va a ir del gobierno sin tomar ninguna medida de ajuste. Es una pretensión absolutamente caprichosa. Hay que hacer políticas más o menos razonables, no se puede ignorar la situación. Estamos en un momento bastante delicado, hay como una calma que precede a la tormenta. Habrá que ver que sucede en las próximas semanas en el Congreso y sobre todo que son capaces de hacer los dirigentes de los distintos partidos que me da la sensación que tienen un desafío muy importante por delante y esperemos que estén a la altura. En muchos casos se dan estas reacciones como dije en el caso del gas. Hay gente que está pagando tarifas bajísimas, Argentina paga el gas muy barato y la garrafa sale más cara para el pobre que el gas en un barrio de clase media. El kirchnerismo montó una política redistributiva a favor de sectores que no lo necesitan y eso hay que terminarlo cuanto antes”.
“Hay que ver quiénes serían los protagonistas de este bipartidismo en este escenario. Si las tendencias disruptivas tanto dentro del peronismo como en el radicalismo se moderan y prima cierta disciplina partidaria entonces ellos dos pueden volver a ser el eje de coaliciones alternativas. El problema que sigue planteado en la política argentina desde hace décadas -y que en esta situación tampoco se ha resuelto- es cuál es la diferencia entre el PJ y la UCR, porque uno puede decir que son coaliciones que compiten entre sí. ¿Acaso no tienen simiitudes en muchos aspectos? ¿No están proponiendo más o menos las mismas cosas? Entonces quedan demasiadas cosas afuera de esas coaliciones en términos de cambio social, de reformas de mercado, de alternativas de política exterior, hay muchas alternativas que ni radicales ni peronistas están demasiado preocupados por responder y eso es lo que da pie a la idea de que va a seguir siendo un bipartidismo imperfecto y que las fuerzas de la sociedad más dinámicas no están bien representadas ni en el radicalismo ni en el peronismo. Eso no quiere decir que alternativas como las de Kirchner vayan a florecer. El hecho de que hay un votante más progresista que no está conforme con radicales o peronistas explica en alguna medida esa demanda por nuevas opciones de la cual en alguna época vivió el kirchnerismo pero ya no puede volver a hacerlo”.
“Tengo mis dudas sobre qué es lo que va a hacer Elisa Carrió. Me da la impresión que puede hacer cosas muy diferentes y depende mucho de qué dice su olfato. Ella es una persona bastante intuitiva y esperemos que se de cuenta que negarse a dialogar no es
una buena opción. Puede llegar a venir con la idea de que Margarita Stolbizer estuvo bien y acallar las batallas internas que se ha tramado entre los más fieles “lilitos” y Stolbizer y otra gente. Pero también puede venir a plantear guerra con la idea de que el diálogo no va a fructificar y ofrecerse como esa
figura de competencia desleal frente a los más moderados que están tratando de ofrecer una vía de escape al dilema que les plantea Kirchner. Y Kirchner y Carrió pueden volver a hacer el juego de ser las dos figuras antagónicas que juegan un juego que en realidad los beneficia exclusivamente a ellos. Un juego
muy destructivo para todos los demás en términos de fuerzas políticas pero puede ser un juego que por un tiempo complique aun más las cosas. Ese es mi temor. Que Carrió crea que su futuro sigue atado a ser la anti kirchnerista más implacable. Bueno, con esa actitud vamos muertos”.
“Carlos Reuteman está tan preocupado como cualquier otro observador de lo que es capaz de hacer Néstor Kirchner en términos de dañar las posibilidades del peronismo. En ese sentido, la situación cambia mucho si Reuteman es el candidato del mismo
partido que Scioli o es de otro peronismo. O va por la ruptura del partido o va a recoger el conjunto del peronismo y eso va a depender mucho de qué posibilidades haya de cierta paz interna, y que finalmente todo el partido se alinee atrás del nuevo candidato y se establezca algún tipo de convivencia a la Menem -
Duhalde. Una convivencia seguramente con distancia y críticas pero donde no hay una ruptura abierta y si Néstor insiste con su estrategia de tres tercios yo creo que Reuteman tiene las cosas más complicadas y ahí yo no estoy tan seguro que no tenga más futuro una candidatura de Macri porque el peronismo puede
quedar tan comprometido que puede haber una ola de votos anti partido y entonces toda esta discusión sobre bipartidismo y de cómo funcionan las estructuras políticas pasa a un segundo plano porque volvemos a una situación donde en realidad no hay disciplina partidaria y a gente vota y la idea de un
outsider queda más abierta. Es más fácil para Macri decir votenme a mi, soy yo solo y no tengo nada que ver con el PJ”.
“La posible alquimila Cobos presidente - De Narváez gobernador me llama la atención, puede ser que funcionan esas cosas pero es como mezclar todo tipo de ingredientes para ver qué resulta. Me
trae mucha desconfianza pero puede ser que funcione si se extiende genera idea de los partidos que quedan trabados logran resolver sus problemas de disciplina. Casi cualquier juego se puede abrir, hay todo tipo de escenarios imaginables si a crisis política se agrava”.